Presentamos algunas recomendaciones desarrolladas con distintos equipos y colegas para asegurar la continua productividad y motivación de los colaboradores durante el trabajo remoto.
Elvira Odreman: Mas que nunca deben las empresas adaptar procedimientos de trabajo basados en esta nueva cultura.
El teletrabajo ha evolucionado de ser solo un beneficio para colaboradores a convertirse en una realidad diaria para muchas personas alrededor del mundo, derivado de las medidas necesarias para evitar y disminuir la propagación del COVID–19. Con base en los retos que enfrentan las empresas a nivel mundial, AsesorArtes sugiere algunas mejores prácticas, teniendo en consideración los pilares.
Informacion Personal
Llegar a un acuerdo con los colaboradores para recolectar la siguiente información:
• Su correo electrónico y teléfono celular.
• Correo electrónico y contactos de los clientes, de ser necesario.
• Detallar el calendario interno del equipo, días festivos y eventos relevantes.Actualizar la firma en su correo para agregar el número de celular.
Comunicar activamente con los gerentes y miembros del equipo si ocurren cambios en el calendario.
Tecnología
Asegurar el acceso y entendimiento de todas las herramientas tecnológicas (incluyendo
mensajería instantánea y salas de teleconferencia).
Actualizar las invitaciones de las reuniones con el uso de las herramientas de colaboración
remota.
Probar las herramientas tecnológicas antes de las reuniones para asegurar su buen
funcionamiento.
Examinar la conexión de internet en la red casera o en su defecto, encontrar una
conexión alternativa.
Respetar siempre las diferencias de las zonas horarias y horas de trabajo.
De ser necesario, ordenar equipos (hardware) para el adecuado cumplimiento del trabajo
remoto y someter la orden a aprobación por parte del líder.
Empezar a modificar el contenido de los entrenamientos y prácticas para que se puedan llevar a cabo de manera virtual durante algún tiempo.
Correo Electronico
Atender los correos electrónicos una vez recibidos, indicar un tiempo tentativo de resolución y
dar el seguimiento correspondiente.
Ser una persona proactiva, clara y detallada.
Reconocer cuándo enviar un email no es tan productivo y cuando es más apropiado realizar llamadas telefónicas.
En caso de no tener solución, dirigir a la gente hacia miembros relevantes del equipo
con la información detallada del contacto